CIUDAD DEL VATICANO (CNS) — La mañana después de que los médicos del Papa Francisco dijeran que permanecía en estado “crítico” y que mostraba signos iniciales de insuficiencia renal, la oficina de prensa del Vaticano dijo que el Papa estaba de buen ánimo y que continuaba con su tratamiento.
La oficina de prensa también anunció que el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano, dirigiría un rezo público del rosario por la salud del Santo Padre a las 7 p.m. del 24 de febrero en la plaza de San Pedro.
El rezo del rosario será un momento para mostrar la cercanía de la Iglesia al Papa y a todos los enfermos, dijo Matteo Bruni, director de la oficina de prensa del Vaticano.
El Papa Francisco, que cumplió 88 años en diciembre, está hospitalizado en el hospital Gemelli de Roma desde el 14 de febrero; los médicos le diagnosticaron una neumonía doble.
La actualización de la mañana del Vaticano sobre la condición del Papa el 24 de febrero fue tan breve como las otras declaraciones matutinas durante estos días. El comunicado dijo: “La noche ha transcurrido bien, el Papa ha dormido y está descansando”.
La oficina de prensa del Vaticano dice que su “estado de ánimo es bueno”, que continúa su tratamiento y que no tiene dolor. El Papa Francisco puede y sigue levantándose de la cama.
La oficina de prensa publica cada noche un comunicado más extenso, que, según los médicos, redactan y entregan al Papa para su aprobación antes de la publicación.
El estado del Papa Francisco seguía siendo “crítico” la tarde del 23 de febrero, habían dicho sus médicos, con análisis de sangre que mostraban “una insuficiencia renal inicial, leve, que está bajo control”.
El Papa no tuvo otra “crisis respiratoria”, como la que experimentó el 22 de febrero, el boletín de los médicos había dicho, pero continuó utilizando oxígeno suplementario a través de una cánula nasal.
Una transfusión de sangre administrada el 22 de febrero, decía el boletín, resultó beneficiosa y causó un aumento del valor de la hemoglobina. Sin embargo, el boletín añadía que su recuento de plaquetas seguía siendo bajo.
“La complejidad del cuadro clínico, y la espera necesaria para que las terapias farmacológicas den algún resultado, hacen que el pronóstico siga siendo reservado”, habían dicho los médicos a última hora del 23 de febrero.
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