El Año de la Eucaristía se celebrará con un enfoque especial en “Cristo en la Congregación” el domingo 31 de octubre, la víspera del Día de Todos los Santos, en la Arquidiócesis de Baltimore, como recordatorio de la presencia real de Jesús en su Iglesia. Con ese mismo espíritu, la parroquia de San Ignacio, Hickory, en Forest Hill, dará la bienvenida a la exhibición “Los Milagros Eucarísticos en el Mundo”, junto con una reliquia de primera clase del Beato Carlo Acutis, su creador, del 3 al 7 de noviembre. El siguiente artículo presenta a dos jóvenes feligreses de Hickory que continúan su obra.
Tras contemplar la presencia real de Jesús en una procesión y adoración eucarística, Abigail Huber y Benjamin Boegner, jóvenes feligreses de San Ignacio, Hickory en Forest Hill, sintieron que el corazón les ardía de convicción, amor y pasión por la Eucaristía.
Entre compañeros que podrían no ser religiosos, estos chicos “normales”, al igual que el Beato Carlo Acutis, se convirtieron en discípulos de Cristo, no solo en la iglesia y en las calles, sino en la web.
“El Año de la Eucaristía encuadra muy bien con la teología de nuestra parroquia”, dijo Monseñor James Barker, párroco de San Ignacio, que comenzó la exposición del Santísimo Sacramento después de la Misa diaria poco después de su llegada hace unos 20 años. “Somos una comunidad muy centrada en la Eucaristía”.
“Espero que podamos tomar la presencia del Señor en la Eucaristía y compartirla a través de nuestra oración y la forma en que tratamos a las personas. Eso es lo que el mundo necesita hoy”.
Huber, de 15 años, recibe educación en casa en Abingdon y ha servido en su parroquia como monaguilla y sacristana. Cabe resaltar que ella es la segunda niña que sirve como sacristana en la historia de la parroquia, la cual fue fundada en 1792.
Ella recuerda que al coordinador del ministerio de jóvenes se le iluminaba la cara cuando hablaba de Dios y al recibir la Eucaristía era como si “La Navidad hubiera llegado temprano”.
Huber tuvo una experiencia similar en el Campamento Veritas, un campamento católico de verano, donde experimentó una “noche que le cambió la vida”. En esa noche, el salón se había llenado de alegría y amor, había muchos jóvenes tocados hasta las lágrimas y el sacerdote bendecía con la custodia a cada uno de los jóvenes presentes.
“Si esto es lo que se siente en la tierra”, dijo Huber, que aspira a estudiar teología y psicología en la Universidad Franciscana de Steubenville en Ohio, “no puedo imaginar cuán asombrosamente felices seremos en el cielo”.
Su “amor por hablar de Jesús” la inspiró a abrir una cuenta de Instagram (@cartography.ofthe.bible) en la que comparte la verdad de la fe católica, el gozo de recibir y adorar la Eucaristía al igual que sus experiencias eucarísticas con otras personas, especialmente con los jóvenes.
Boegner, originario de White Hall, fue voluntario en el ministerio de jóvenes adolescentes y jóvenes adultos en la parroquia antes de convertirse en misionero de la Fraternidad de Estudiantes Católicos Universitarios (FOCUS, por sus siglas en inglés) en la Academia Militar de los Estados Unidos en West Point, Nueva York.
Actualmente el misionero estudia una maestría en psicología en línea ofrecida por la Universidad de la Divina Misericordia y está discerniendo la vida religiosa.
“Comencé a hacerle preguntas a Monseñor Barker sobre el discernimiento para el sacerdocio”, dijo Boegner. “Él es un líder increíble y muy sólido en su fe”.
En sus dos años en West Point, Boegner y su equipo de FOCUS han organizado la adoración eucarística semanal y la Misa dominical. Además, él ha dirigido tres estudios bíblicos e iniciado un grupo de ayuda para hombres que lidian con la pornografía y la masturbación, “para ayudarlos a liberarse de ese vicio”.
Aunque el internet puede usarse para fines incorrectos, también se puede usar para el bien, como para difundir la colección de milagros eucarísticos realizada por el Beato Carlos Acutis, un joven italiano que murió a los 15 años. Boegner dice a los cadetes que el posible futuro santo patrón de internet era un muchacho común y corriente que jugaba videojuegos y que programaba códigos informáticos, todo mientras vivía para el Señor.
“Hay muchos jóvenes que piensan que no son dignos de predicar el Evangelio, así que les hablo de este santo ‘millennial’”, dijo Boegner. “Eso ayuda a los cadetes a comprender que pueden hacer sus tareas y vivir para el Señor al mismo tiempo”.
El Beato Acutis fue el intercesor elegido para “SEEK 2020” (conferencia anual de FOCUS para jóvenes universitarios), la cual se llevó a cabo virtualmente debido al COVID-19, y los cadetes tuvieron que ver videos pregrabados y eventos en vivo desde la capilla de West Point en lugar del tradicional evento en vivo.
“Cuanto más aprendía de él (Beato Acutis)”, dijo Boegner, “más reconocía la presencia de Cristo en la Eucaristía, particularmente durante la Misa, cuando el sacerdote consagra la hostia. Incluso comencé a hacer una reverencia en el momento de la consagración. Tal vez el Beato Acutis estaba orando por mí”.
En un video de YouTube sobre el Año de la Eucaristía, el Arzobispo William E. Lori citó al Beato Acutis diciendo: “Si nos ponemos delante del sol, nos bronceamos; pero cuando nos ponemos delante de Jesús en la Eucaristía, nos convertimos en santos”.
Los Caballeros de Colón de San Ignacio, Hickory, patrocinan la exhibición “Los Milagros Eucarísticos en el Mundo” que tendrá lugar del 3 al 7 de noviembre con una reliquia de primera clase del Beato Acutis, su creador.
Monseñor Barker, que procura pasar de 15 a 20 minutos “en el santuario junto con el Señor” todos los días, está emocionado por la exhibición que llegará a su parroquia.
“Creo que la Eucaristía es un regalo incomparable”, dijo. “Espero que al tener la exhibición aquí, algunos de nuestros jóvenes puedan apreciar el regalo que el Señor nos ha dado en este Sacramento”.
Para más información sobre el Año de la Eucaristía, visite www.archbalt.org/year-of-the-eucharist
Envíe un correo electrónico a Priscila González de Doran a pdoran@CatholicReview.org
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