El Archidiócesis de Baltimore celebra el Mes Nacional de la Herencia Hispana September 19, 2020By Daniel Zawodny Special to the Catholic Review Filed Under: En Español, Hispanic Ministry Niños y niñas llevan las banderas de varios países durante una Misa del Día de Acción de Gracias en 2017 para conmemorar la canonización de San Óscar Romero en el Catedral de Maria Nuestra reina en Homeland. El mes de septiembre trae consigo olas de celebración a través de Latinoamérica por los nueve países en el hemisferio que celebran su independencia durante el mes. El 15 de septiembre, el mismo día que Nicaragua, El Salvador, Honduras y Costa Rica declararon su independencia de España en 1821, empezó el Mes Nacional de la Herencia Hispana en el cual se celebra la diversidad latina en los Estados Unidos. Según los datos más recientes de la Oficina del Censo de los Estados Unidos, 10.4 por ciento de personas en Maryland se identifican con origen hispano o latino. Aunque este porcentaje es menos de lo del país en general — 18.3 por ciento de las personas en los Estados Unidos se identifican con origen Hispano o Latino — la Ciudad de Baltimore y varias otras partes del estado han visto un incremento estable de residentes latinos durante la última década. Con el incremento también han venido olas de parroquianos nuevos a la Archidiócesis de Baltimore. Para recibirlas, las iglesias a través de Maryland han tomado pasos para dar la bienvenida a los Hispanos y entretejerlos con sus comunidades. El Padre Jaime Garcia-Vasquez de San Francisco de Sales en Abingdon y El Príncipe de la Paz en Edgewood vino a Maryland desde su país nativo Colombia en 2007 para ayudar a la Archidiócesis pastorear a la creciente comunidad Hispana. Casi no hablaba Inglés y nunca había pasado un invierno como el del Noreste — el aeropuerto de Newark, NJ lo recibió el 1 de enero con un atraso de seis horas debido al clima durante su escala un camino a Baltimore. “Yo estaba dejando por detrás todo lo que conocía,” recordó el Padre Garcia-Vasquez. “Los Estados Unidos nunca fueron parte de mi plan, pero fueron planes humanos. Dios tenía otros planes para mí.” Parroquianos actúan la apariencia de Nuestra Señora de Guadalupe durante una Misa el 9 de diciembre de 2018 en la iglesia Sagrado Corazón de Jesús en Highlandtown. Antes de la llegada del Padre Garcia-Vasquez a la comunidad de San Francisco, la parroquia tenía dos grupos juveniles — uno principalmente de jóvenes Hispanos y el otro de jóvenes no-Hispanos. Ahora, solo hay un grupo que se enfoca en la inclusión, igual como otras iniciativas parroquiales con el mismo enfoque. “Tiene que venir desde un punto de comprensión que todos somos una comunidad,” dijo el Padre Garcia-Vasquez. “Cada quien hace su parte para hacernos sentir como una comunidad.” Días festivos y liturgias especiales tienen un sabor cultural diferente a través de Latinoamérica. De manera similar como se hace un su país nativo Colombia, las celebraciones del Jueves Santo de Padre Garcia-Vasquez incluyen una procesión de la Eucaristía después de la Misa; la Misa del Domingo de Ramas también empieza con una procesión desde afuera de la iglesia hasta el santuario. Según el sacerdote, estos métodos de alabar a Dios cautivaron a muchos miembros no-Hispanos de su iglesia, quienes entonces querían involucrarse en las celebraciones. Muchas parroquias a través de la Archidiócesis honran el Mes Nacional de Herencia Hispana con las devociones a la Santisima Maria que son comunes en los países Latinoamericanos, como la celebración de Nuestra Señora de la Nube en Ecuador o la celebración de Nuestra Señora de Guadalupe en México. Normalmente son los Consejos Pastorales Hispanos, comités que hay en muchas iglesias que ayudan a conectar la herencia Hispana a la identidad general de la parroquia, que lideren las celebraciones. El Padre Garcia-Vasquez celebra la Misa en Español los domingos en San Francisco de Sales, una de 21 iglesias a través de la Archidiócesis que ofrecen Misas en Español durante la semana. Otra iglesias de ese grupo es la San Gabriel en Woodlawn, una comunidad parroquial vibrante que tiene miembros de 37 países distintos, incluyendo España y 11 países Latinoamericanos. Una presentación de la Pasión de Cristo se actúa en Highlandtown en marzo de 2013 durante una procesión desde la iglesia Sagrado Corazón de Jesús. Hermana Misionera Auxiliar del Sagrado Corazón Sonia Fernández, de Nueva York y herencia boricua, se siente en casa en las comunidades diversas. Antes de entrar en su formación religiosa en Baltimore, trabajó para la Asociación Americana del Corazón (AHA por sus siglos en Inglés) en Queens, NY mientras que trabajaba de catequista. Su trabajo le pidió que se mudara a Texas, una propuesta que le hizo varias preguntas grandes a ella — fue de retiro espiritual para buscar discernimiento y conoció un grupo de hermanas religiosas de todas partes de Latinoamérica. “Yo conocía muchas (personas) religiosas, pero nunca había conocido una Hispana (religiosa),” dijo la Hermana Sonia. Al final, ella se fue a Texas, pero no con la AHA. Ella fue como parte de su formación religiosa para trabajar con la comunidad Mexicana en San Antonio después de dejar su trabajo para la vida religiosa. Como en San Francisco de Sales, el equipo de San Gabriel, bajo el liderazgo de su pastor, Monseñor Thomas L. Phillips, ha incorporado a sus liturgias varios elementos culturales de las tradiciones de los miembros Africanos y Hispanos de la parroquia. Suele que se leen las lecturas en varios idiomas, igual como las canciones que se cantan por uno de los varios coros que tiene la iglesia. San Gabriel es la parroquia de mucha gente de El Salvador, la tierra nativa de San Oscar Romero, asesinado por el ejército Salvadoreño en 1980 y conocido no oficialmente como en santo patrono de las Américas. Dos veces al año, en marzo y octubre, la gente de San Gabriel conmemora la muerte y canonización respectivamente de San Romero, del cual una figura hecha de madera se trajo desde El Salvador para adornar el santuario de la iglesia. Hermana Misionera Auxiliar del Sagrado Corazón Sonia Fernandez, en medio, colabora con voluntarios en la iglesia San Gabriel en Woodlawn para dar su mano para la Ayuda San Gabriel Dispensa de Alimentos durante la pandemia de Coronavirus. El ministerio Hispano formal en la Archidiócesis de Baltimore tiene raíz en los años 60, cuando el Apostolado Hispano, que hoy en día se ha convertido en el Esperanza Center y se dirige por las Caridades Católicas, empezó a dar clases informales de Inglés a los inmigrantes viviendo en la Ciudad de Baltimore. Hoy, junto con los ministerios individuales de las parroquias alrededor de la archidiócesis, el Consejo Pastoral Arquidiocesano, integrado formalmente dentro del Centro Catolico en 2000, sirve para acompañar Católicos Hispanos en Baltimore en el desarrollo de su fe y apoyar a las parroquias de la área. El Consejo, liderado por Lia Salinas, asegura que el arzobispo y los obispos auxiliares se enteren de los asuntos que afectan a la comunidad Hispana. Obispo Bruce Lewandowski, C.Ss.R., sirve los papeles de Vicario Episcopal para la Comunidad Hispana y pastor de la parroquia Sagrado Corazón de Jesús en Highlandtown. Copyright © 2020 Catholic Review Media Print